Eso debí pensar aquél oscuro mes de Febrero cuando decidí comprar de forma muy impulsiva mi nueva adquisición cosmética.
En realidad, yo lo que deseaba ( y deseo) era conseguir el aspecto piel porcelana/nacarada que nos venden en todas las revistas y tras probar varios productos anteriormente con la misma función, ninguno me convencía.
Sin embargo, algo me decía que si acudía a un stand de Mac, me encontraría con mi producto estrella. Y así es: lo bautizo como mi producto favorito del mes de Febrero. Básicamente, porque no hay nada más agradable en este mundo que ver cómo caen chuzos del cielo, mientras te escondes en tu perenne chamarra de invierno con ese toque especial que te distingue del resto de los mortales con sus caras de agobio invernal.
EXPERIENCIA CREAM COLOUR BASE "PEARL" DE MAC
A primera vista, no llama la atención nada en absoluto. Es más, parece una simple sombra en crema con partículas doradas que más tarde o más temprano terminarás abandonando en el baúl de los recuerdos (armario de potingues, fondo a la derecha).
Es en el preciso instante en el que decides probarlo encima o debajo de la base de maquillaje, cuando te das cuenta del tremendo poder que tiene un pequeño producto. Ilumina la piel al instante, sin dar una sensación de pegote, ni de producto brillantoso, artificial, ni nada por el estilo.
La pregunta que habría que formularse sería la siguiente: ¿Qué es lo que busco yo en un iluminador? y en mi caso exijo estos requisitos:
- Se tiene que apreciar de forma notable (pero no sobresaliente). Es decir, que se distinga que ciertas zonas de la piel están iluminadas y no por obra y gracia del Espíritu Santo.
- El resultado ha de ser natural y nada artificial. Véase mi experiencia con High Beam de Benefit, que con su pincelito y botecito daba la sensación de que me daba brochazos de purpurina.
-No resultar graso, que para eso ya está mi piel.
Este producto se ajusta perfectamente a mis exigencias. Tiene un resultado muy natural a la vez que visible, no aporta brillos a pesar de las partículas que se aprecian en el envase y no añade grasa a la piel.
Se considera una fórmula multiusos, lo puedes aplicar en párpados como sombra o como complemento de ella. Se puede utilizar, además, bajo la base o encima de ella, en función del resultado más o menos natural que busquemos. También añadiría que casi cualquier tono de piel se vería favorecida con esta tonalidad dorada, de hecho, mi piel es blanquecina rosada y el pequeño toque luminoso se ve espectacular, con lo que en pieles con subtono beige ha de verse aún más natural si cabe.
El tarrito tiene 3,2 gr.y su precio son 19,50 €, que en un primer momento es un tortazo, estoy de acuerdo, pero...¿ y lo que duran esos 3 gr.?
No me puedo marchar sin poner nota al producto, que en este caso y para variar, es un sobresaliente como una casa, un 9. No me quiero repetir, pero cumple mis expectativas a la perfección, es multiusos y dura toda una vida. Para lo demás, Mastercard.
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